Cuento Corto: Grises

Recordaba haber visto algo así en la televisión un día.

Hace ya mucho tiempo, que todo este cuento de los “extraterrestres” y bla bla bla andaba dando vueltas en el subconsciente de la población, películas, programas, música, videos, libros, y un montón de estímulos para que la gente se sugestionara al respecto, y vivieran con miedo a algo que nunca había visto, bueno, ya había pasado con Dios no.

Yo no creía en nada de esas cosas, en un principio me parecía graciosas, pero ya con tanto alboroto, me parecían molestas, era como una explosión de marketing de todo tipo, gente en programas contando sus experiencias de “abducciones”, locos en televisión asegurando avistamientos, contactos de todos los tipos y cosas por el estilo. No me interesaba para nada el tema, pero lamentablemente, mi casa no se salvaba de esta epidemia.

Mi madre y mis dos hermanas, pasaban todo el día comentando los programas y contando chismes al respecto, “tal vecina me dijo que habían abducido a su esposo”, “una amiga dijo que vio un extraterrestre en el cielo”, y una cantidad de sandeces relacionadas con el tema de moda.

En la universidad ni hablar, llegaban supuestos “conspiradores” a dar charlas sobre contacto extraterrestre, abducciones, avistamientos, entre otras cosas. Para mi suerte, mi grupo de amigos, tampoco era muy partidario de todo esto, no creían, no les interesaba, estaban con los pies en la tierra, preocupados de lo importante y no pendientes de una invasión extraterrestre que se aproximaba, como se especulaba en los medios.

Raramente, un día, uno de mis amigos llegó muy extraño a clases, muy callado,  y con cara de asustado, pensamos que podría haber tenido algún problema con las drogas, ya que todos consumíamos esporádicamente, pero no le preguntamos que le pasaba, hasta ese día en la tarde. Nos reunimos todos en mi casa como de costumbre, a conversar, tomarnos algo y pasar un buen rato, mi amigo seguía así, mientras todos le preguntaban que le sucedía y el no respondía, como si no escuchara nada de nada.

En un momento específico, había alrededor de 5 amigos preguntándole al mismo tiempo, me pareció muy molesto, pero antes de yo poder decir que lo dejarán en paz, mi amigo se levantó del sillón, abrió los ojos muy grandes, con pupilas dilatadas como si fuera de noche, y su boca. De su boca salió un grito de desesperación, miedo, un grito destemplado que nos dejó a todos callados hasta que cayó inconciente en el sillón.

Todos en shock preguntándonos que había pasado, la sensación de miedo, el frío, inundó la habitación. Mi madre entró por la puerta enojada diciéndonos que nos dejáramos de gritar, que ya era tarde, pero se le acabaron las palabras cuando encontró a mi amigo tirado en el sillón, con la palidez de un muerto, o de alguien, que vio lo mas espeluznante de su vida.

Nadie sabía que había sido aquel incidente, pero llamamos a sus padres, lo vinieron a buscar en auto y todos se fueron a sus casas.

Durante la semana, no sucedió nada, pero mi amigo no fue ningún día a la Universidad y cuando lo íbamos a ver a la casa no salía nadie, es como si la familia entera hubiese desaparecido, las cosas se estaban poniendo muy raras, nadie entendía nada, pero no había nada que hacer, cada uno de vuelta a sus quehaceres.

La semana siguiente, la cosa empeoró, una de las amigas de nuestro grupo, llegó exactamente como el individuo anterior, muy pálida, callada y con cara de asustada, todos nos dimos cuenta y no esperamos hasta la noche para ir a ver que le sucedía, todos nos acercamos y le hablamos, preguntándole como estaba, y cosas muy comunes, pero se mantenía callada, por minutos se mantuvo en silencio y mirando hacia la nada con los ojos bien abiertos y las pupilas dilatadas, exactamente como la situación anterior.

De repente, miró hacia abajo y susurró unas palabras en un idioma extraño, nadie entendió una palabra, y de un momento a otro, cayó desmayada, conmoción de la Universidad, todos observando como se llevaban a mi amiga en la ambulancia, como si nunca hubieran visto a nadie desmayado.

Todo se estaba volviendo muy extraño, ya iban dos amigos que les pasaba lo mismo, por un momento pensé que podría ser una abducción, pero no, es estúpido, quizá andaba algún virus dando vueltas por ahí y la gente se está enfermando, si, eso debe ser.

Las palabras que mi amiga había dicho, las tenía en la mente, como si las supiera, fueron sólo susurros, pero se me repetían en la cabeza exactamente como las escuché, como si entendiera su significado, esto ya me estaba asustando, llamé a mis amigos para reunirnos a hablar del tema.

Esa noche les conté lo que escuchaba, y me dijeron que ellos no, que cuando mi amiga agachó la cabeza en ese momento, no había dicho nada, que no sabían de que estaba hablando, pregunté si bromeaban, pero me dijeron que era muy en serio, un escalofríos recorrió mi cuerpo.

Todos ya se había ido, y ya era muy tarde, las 02:15 de la madrugada aproximadamente, acostumbraba a quedarme tarde en el computador, así que no era novedad no tener sueño a esa hora, pero al día siguiente tenía clase muy temprano, por lo que necesitaba dormir.

Apagué el computador, y me fui a la cama, aún con el susurro dando vueltas en mi mente, pero no le di importancia, estaba cansado y tenía cosas que hacer, así que me fui a dormir.

En un momento, desperté, un poco susado, vi la hora, las 03:07 de la madrugada, moví la mano para alcanzar mi celular, pero no pude moverme, me pareció muy raro, podía ver todo a mi alrededor, pero no me podía mover, la desesperación se hizo presente, las sábanas pesaban toneladas y la temperatura subía y subía, comencé a gritar, llamando a mi madre, me movía muy rápido, tratando de salir, pero no daba resultado, ya no sentía mi cuerpo.

Los susurros se escuchaban en mi nuca, cada vez mas y mas fuerte, un miedo profundo me invade, el miedo más grande que jamás había sentido, siento lágrimas caer, alguien abre la puerta, una luz tenue se asoma, veo varias siluetas delgadas y muy altas, un silencio abominable reina en la habitación.

Recordaba haber visto algo así en la televisión un día.